viernes, 10 de febrero de 2012

Nunca he tenido una caja de chocolates, de esos de rellenos distintos, ni globos para dejar ir, y quiero.
Quiero acostarme en el césped del lago de fundidora a dejar ir globos y mirarlos hasta perderlos en la inmensidad del azul del cielo, quiero comer chocolates hasta artarme y quiero llorar mucho para luego reír.
Quiero hornear pan y tener un perro, quiero usar vestido todos los días, quiero plantar tomates. Quiero escribir un libro y aunque suene trillado, quiero plantar un árbol, quiero que se vaya la luz en toda la ciudad y que se miren las estrellas, quiero caminar descalza sobre la arena, quiero comer higos del zaguán de mi abuela, y quiero volver a soñar despierta.
Estoy llena de quereres.
Ahora mismo quiero un café pastel de zanahoria y una manta muy suave. Quiero una tarde libre.

Necesito una tarde libre.
Todo llega a su fin, todo tiene su limite y cuando eso sucede no hay mas que hacer, mas que volver a empezar. La única constante es el cambio, la renovacion, la libertad de decidir.
Estoy tan llena de quereres, tan saturada de preguntas, tan cansada. Todo tiene un limite, y yo estoy llegando al mio.
Que nos espera, que esperamos? que aguardamos en el paso de los días, es solo un va y ven de sentimientos? de experiencias? de eso se trata la vida?

Hay días en los que despierto y comienzo el día en automático, haciendo lo que debo, porque así debe ser, porque el mundo sigue girando decidas levantarte o no y que mejor que hacer algo mientras esperas a que se te acabe el tiempo, en esa espera supongo que llegan los hijos y entonces todo tiene sentido, tu existencia cobra valor, ahora vives para alguien mas que para ti mismo y quieres detener el tiempo, supongo, creo que eso sentiría yo.

Luego me pregunto porque esperar para darle valor a mi vida, luego me aburro y pienso que precisamente porque es mi vida puedo decidir que sentir al respecto, no se, me envuelvo en discrepancias.

Y sigo siendo la misma, contradictoria, confusa, certera, a veces irradiando luz y muchas otras solo una sombra gris que vaga por la ciudad buscando el sentido de las cosas.

martes, 7 de febrero de 2012

Me heriste profundamente.

Lo peor de tu lista de agravios fue hacerme sentir que te jactas de conocerme mas que a la palma de tu mano, cuando tus palabras fueron dichas como si hablaras de alguien mas, de alguien que no soy yo, de alguien que no estaba en la cocina en ese momento.

Te encargaste con cada aseveración de irme hiriendo de poquito hasta llegar al máximo de herida soportable, debo reconocer que la herida fue memorable, como ninguna otra...puedes elegir de cualquiera de las heridas de mi corazón que has conocido y cuando hayas elegido la que consideres peor, esa, esa multiplicala por mucho y el resultado es la herida de tus palabras.

Por nuestra promesa, y porque tu hermana siempre sera la tía, la tía oficial... y porque amo a tu hijo mas de lo que te amo a ti, creía ("ilusa" para dramatizar) que sabiendo que tu hermana siempre sera la tía oficial, me elegirías, confiarías en mi, me creerías capaz de que si algo malo les pasara yo era la indicada para hacerme cargo... pero, como siempre hay un pero, en tu corazón y en tu mente no fue así, los motivos? solo tu los sabes, pueden ser todas tus aseveraciones vizarras, o ninguna de ellas, puedes tener motivos o no tenerlos, para mi corazón ahora tripa, da igual, la finalidad fue la misma, así que los motivos salían sobrando, era suficiente hasta la parte de lo pensé y aunque Juan Pablo no me cae muy bien, decidí por ellos...hasta ahí sentía un dolor soportable, no pensaba en tus motivos, creía que solo porque eran una "pareja estable" y aunque supiera que los solteros también pueden bautizar, me protegí diciente.- Si, ellos están casados! esta bien! mientras te regalaba mi sonrisa mas fingida y ojos vidriosos. Luego empezaste.- Pues por eso mismo, porque tu estas casada! y pues ya sabes como son en las iglesias, hubiéramos tenido que ir con el Padre Infante!, mientras yo seguía sonriendo fingidamente... mientras insistías que si yo te hubiera hecho lo mismo si hubieras llorado, insistías en que pensara como me sentía,mientras tanto yo no pude contenerlas mas y rodaron las primeras lagrimas.

Te dije que si me dolía pero que te entendía, que estaba bien. Pero creo que no me escuchaste, porque remataste mi corazón maltrecho con tus siguientes palabras.- Aparte, pues pense en que no tienes tiempo... No se que cara hice porque quisiste explicarme, rematandome con aquello de, ya sabes tu con tu vida (movimiento de manos que indica confusión) no tienes tiempo, ya vez con lo de Alfredo, que te la pasabas llorando y entre uno y otro pues...(movimiento de manos que indica confusión)

Aqui y en pinche China, eso significa no te considero madura, centrada, capaz. PUNTO.

Luego como sacado de la manga, mencionaste la muralla entre tu mama y yo, mientras tanto mis lagrimas de llave abierta brotaban sin parar y en mi garganta el nudo ciego de esos pinches nudos gachos de sentimiento me impedía decir algo, cualquier cosa..lo que fuera.

Para cerrar con broche de oro, dijiste que pues mis ausencias debido a la muralla podían afectar, pero que acaso un lazo de ese tipo no me uniría mas a tu familia? independientemente de la muralla? No reforzaría mas lo que dices que sientes por mi? No seria una demostración publica de lo fuerte de nuestra amistad?

Se que no querías hacerme daño, se que no era tu intensión, sin embargo que puedo sentir al respecto? como le hago para que no me duela que la extensión de mi cerebro no me conozca en realidad? Como dejo de sentir que pudo mas lo que sea que piensas de mi, que lo que me conoces? Como es posible que siendo yo, me hayas hecho a un lado en algo tan importante y por los motivos mas inverosímiles, como es posible que haya tenido mas peso mi estado civil de "divorciada" y las rupturas amorosas que me anteceden, que yo misma, que lo que soy, que lo que valgo para ti.

Pues si, aquí estoy...que te puedo decir, no te preocupes, porque el que lo hagas no cambia lo que sientes ni lo que siento, en fin... hoy es uno de esos días en los que de pronto la vida te da un revés y te cambia la perspectiva.