domingo, 13 de septiembre de 2009




Entraste a mi cuarto diciendo.- Yo aun no aguanto escuchar las canciones de tu papa, te dije.- yo tampoco y mientras tu lavabas los platos llorando, yo saque todos los zapatos del closet, los regué en la habitación y me puse a acomodarlos por colores...llorando.
Se nos pusieron los ojos de caricatura japonesa llenos de lágrimas y antes de que tu o yo derramáramos una lágrima, te fuiste...

Hoy es domingo, y ningún domingo sin el, sera igual..

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